Día 255

Cómo permanecer en los caminos de Dios

Sabiduría Salmos 107:1-9
Nuevo Testamento 2 Corintios 12:11-21
Antiguo Testamento Isaías 29:1-30:18

Introducción

Recuerdo haber leído años atrás acerca de un accidente que ocurrió en la Riviera italiana. Un joven conducía su automóvil deportivo por una carretera cerca del mar, era una ruta hermosa y pintoresca, pero el camino no era lo que parecía.

A pesar de que a lo largo del camino había señales de advertencia, este le pareció perfectamente bueno al joven. El desastre lo aguardaba, pues un derrumbe había creado recientemente un precipicio y nadie tendría que haber transitado por ese camino. El joven continuó a gran velocidad e ignoró todas las señales de advertencia; finalmente, se dirigió directamente al acantilado.

A veces no estamos seguros de adónde nos llevará un camino. En otras ocasiones, somos plenamente conscientes de hacia dónde nos lleva, y de todas formas decidimos seguirlo.

Jesús dijo que hay un camino que lleva a la vida. También hay un camino que conduce a la destrucción (Mateo 7:13-14). Las señales de advertencia no se ponen como una amenaza, sino por la seguridad de las personas. Las palabras de Jesús, el Nuevo Testamento y la Biblia en su conjunto, están destinados a mantenernos en el camino que conduce a la vida.

¿Cómo te aseguras de estar en el camino correcto? Una vez que estás en aquel camino, ¿cómo te quedas en él?

Sabiduría

Salmos 107:1-9

Libro V

Salmos 107–150

Salmo 107

1 Den gracias al Señor, porque él es bueno;
 su gran amor perdura para siempre.

2 Que lo digan los redimidos del Señor,
 a quienes redimió del poder del adversario,
3 a quienes reunió de todos los países,
 de oriente y de occidente, del norte y del sur.

4 Vagaban perdidos por parajes desiertos,
 sin dar con el camino a una ciudad habitable.
5 Hambrientos y sedientos,
 la vida se les iba consumiendo.
6 En su angustia clamaron al Señor,
 y él los libró de su aflicción.
7 Los llevó por el camino recto
 hasta llegar a una ciudad habitable.
8 ¡Que den gracias al Señor por su gran amor,
 por sus maravillas en favor de los hombres!
9 ¡Él apaga la sed del sediento,
 y sacia con lo mejor al hambriento!

Comentario

1. Toma el «camino recto»

«Den gracias al Señor, porque él es bueno; su gran amor perdura para siempre» (v.1). No puedes mejorar el propósito que Dios tiene para ti. Dios es bueno y te ama. Él quiere lo mejor para tu vida y tiene un «camino recto» para ella.

Él quiere que camines por sus senderos: «Los llevó por el camino recto hasta llegar a una ciudad habitable» (v.7). No quiere que deambules «por parajes desiertos, sin dar con el camino a una ciudad habitable. Hambrientos y sedientos, la vida se les iba consumiendo» (v.4-5).

La buena noticia es que, donde sea que estés, puedes clamar al Señor (v.6a). Cuando lo haces, «¡Él apaga la sed del sediento, y sacia con lo mejor al hambriento!» (v.9).

En este salmo de acción de gracias por las muchas ocasiones que Dios liberó a Su pueblo, el salmista dice cuatro veces: «En su angustia clamaron al Señor» (vv.6,13,19,28). En cada ocasión, Dios los rescata.

Por otro lado, nada de lo que hayas hecho en el pasado te descalifica para ser parte del pueblo de Dios. El único requisito es que debes clamar a Dios y ser redimido (v.2). La redención significa ser «liberado por Dios». Jesús vino para hacer posible esta redención.

Los «redimidos del Señor» están para contarlo (v.2). Háblale y cuéntale a los demás cómo el Señor te rescató.

Oración

Señor, te doy gracias por todas las veces en mi vida que he clamado a Ti en mis problemas y me has sacado de mi angustia. Dirígeme Señor, te lo ruego, por un camino recto.
Nuevo Testamento

2 Corintios 12:11-21

Preocupación de Pablo por los corintios

11 Me he portado como un insensato, pero ustedes me han obligado a ello. Ustedes debían haberme elogiado, pues de ningún modo soy inferior a los «superapóstoles», aunque yo no soy nada. 12 Las marcas distintivas de un apóstol, tales como señales, prodigios y milagros, se dieron constantemente entre ustedes. 13 ¿En qué fueron ustedes inferiores a las demás iglesias? Pues sólo en que yo mismo nunca les fui una carga. ¡Perdónenme si los ofendo!

14 Miren que por tercera vez estoy listo para visitarlos, y no les seré una carga, pues no me interesa lo que ustedes tienen sino lo que ustedes son. Después de todo, no son los hijos los que deben ahorrar para los padres, sino los padres para los hijos. 15 Así que de buena gana gastaré todo lo que tengo, y hasta yo mismo me desgastaré del todo por ustedes. Si los amo hasta el extremo, ¿me amarán menos? 16 En todo caso, no les he sido una carga. ¿Es que, como soy tan astuto, les tendí una trampa para estafarlos? 17 ¿Acaso los exploté por medio de alguno de mis enviados? 18 Le rogué a Tito que fuera a verlos y con él envié al hermano. ¿Acaso se aprovechó Tito de ustedes? ¿No procedimos los dos con el mismo espíritu y seguimos el mismo camino?

19 ¿Todo este tiempo han venido pensando que nos estábamos justificando ante ustedes? ¡Más bien, hemos estado hablando delante de Dios en Cristo! Todo lo que hacemos, queridos hermanos, es para su edificación. 20 En realidad, me temo que cuando vaya a verlos no los encuentre como quisiera, ni ustedes me encuentren a mí como quisieran. Temo que haya peleas, celos, arrebatos de ira, rivalidades, calumnias, chismes, insultos y alborotos. 21 Temo que, al volver a visitarlos, mi Dios me humille delante de ustedes, y que yo tenga que llorar por muchos que han pecado desde hace algún tiempo pero no se han arrepentido de la impureza, de la inmoralidad sexual y de los vicios a que se han entregado.

Comentario

2. Vive en el camino del amor

El apóstol Pablo estaba absolutamente decidido a hacer lo correcto. Quería seguir el camino recto (v.18).

Había sido acusado falsamente. Los «superapóstoles» (v.11) habían intentado socavarlo. Como resultado, había sido mal interpretado y atacado por aquellos quienes tenían que haber comprendido mejor lo que pasaba. Absurdamente, había sido acusado de no querer tomar dinero de los corintios porque no los amaba (v.13).

Pablo señala que la razón por la que no tomó dinero de ellos fue porque no quería ser una carga para ellos. Les responde: «… no me interesa lo que ustedes tienen, sino lo que ustedes son. Después de todo, no son los hijos los que deben ahorrar para los padres, sino los padres para los hijos» (v.14b).

Fue por causa de su amor por ellos que gustosamente gastó todo para ellos y, de hecho, se desgastó él mismo también (v.15). En palabras de The Message, Pablo siempre actuó de una manera que era «implacable» y «honesta» (v.18, MSG). Todo lo que hizo fue para el beneficio de ellos (v.19). No estaba interesado ni en su dinero ni en sus posesiones, estaba interesado en sus almas.

Pablo quiere que los corintios hagan lo correcto y se mantengan en el camino recto, así como él lo ha hecho. Teme que algunos de ellos puedan estar desviándose del rumbo: «Peleas, celos, arrebatos de ira, rivalidades, calumnias, chismes, insultos y alborotos» (v.20).

Teme que cuando vaya a visitarlos encuentre que «siguen pecando una y otra vez en los mismos viejos caminos, que se han negado a apartarse de la porquería del mal, el desorden sexual y la indecencia en que se revuelcan» (v.21, MSG).

Aléjate de aquellas cosas para asegurarte de estar en el camino que lleva a la vida. El camino que conduce a la vida es un camino de amor, el tipo de amor que Pablo tiene por los corintios.

Oración

Señor, ayúdame a actuar siempre con amor y preocuparme de aquellos por quienes ministro. Oro para que nunca busque mi propio beneficio personal y que el amor sea mi única motivación. Guárdame, Señor, en Tus caminos.
Antiguo Testamento

Isaías 29:1-30:18

Ay de la Ciudad de David

29¡Ay, Ariel, Ariel,
ciudad donde acampó David!
Añadan a un año otro año más,
y que prosiga el ciclo de las fiestas.
2 Pero a Ariel la sitiaré;
 habrá llanto y lamento,
 y será para mí como un brasero del altar.
3 Acamparé contra ti, y te rodearé;
 te cercaré con empalizadas,
 y levantaré contra ti torres de asalto.
4 Humillada, desde el suelo elevarás tu voz;
 tu palabra apenas se levantará del polvo.
Saldrá tu voz de la tierra
 como si fuera la de un fantasma;
tu palabra, desde el polvo,
 apenas será un susurro.

5 Pero la multitud de tus enemigos
 quedará hecha polvo fino,
y la multitud de despiadados
 será como la paja que se lleva el viento.
De repente, en un instante,
6 vendrá contra ti el SeñorTodopoderoso;
 vendrá con truenos, terremotos
y gran estruendo,
 vendrá con una violenta tormenta
y con devoradoras llamas de fuego.
7 La multitud de todas las naciones
 que batallan contra Ariel,
todos los que luchan contra ella
 y contra su fortaleza,
aquellos que la asedian,
 serán como un sueño,
como una visión nocturna.
8 Como el hambriento que sueña que está comiendo,
 pero despierta y aún tiene hambre;
como el sediento que sueña que está bebiendo,
 pero despierta y la sed le reseca la garganta.
Así sucederá con la multitud de todas las naciones
 que luchan contra el monte Sión.

9 Pierdan el juicio, quédense pasmados,
 pierdan la vista, quédense ciegos;
embriáguense, pero no con vino;
 tambaléense, pero no por el licor.
10 El Señor ha derramado sobre ustedes
 un espíritu de profundo sueño;
a los profetas les cubrió los ojos,
 a los videntes les tapó la cara.

11 Para ustedes, toda esta visión no es otra cosa que palabras en un rollo de pergamino sellado. Si le dan el rollo a alguien que sepa leer, y le dicen: «Lea esto, por favor», éste responderá: «No puedo hacerlo; está sellado.» 12 Y si le dan el rollo a alguien que no sepa leer, y le dicen: «Lea esto, por favor», éste responderá: «No sé leer.»

13 El Señor dice:

«Este pueblo me alaba con la boca
y me honra con los labios,
pero su corazón está lejos de mí.
Su adoración no es más que un mandato
enseñado por hombres.
14 Por eso, una vez más asombraré a este pueblo
 con prodigios maravillosos;
perecerá la sabiduría de sus sabios,
 y se esfumará la inteligencia de sus inteligentes.»
15 ¡Ay de los que, para esconder sus planes,
 se ocultan del Señor en las profundidades;
cometen sus fechorías en la oscuridad, y piensan:
 «¿Quién nos ve? ¿Quién nos conoce?»!
16 ¡Qué manera de falsear las cosas!
 ¿Acaso el alfarero es igual al barro?
¿Acaso le dirá el objeto al que lo modeló:
 «Él no me hizo»?
¿Puede la vasija decir del alfarero:
 «Él no entiende nada»?

17 Muy pronto el Líbano se convertirá en campo fértil,
 y el campo fértil se convertirá en bosque.
18 En aquel día podrán los sordos
 oír la lectura del rollo,
y los ojos de los ciegos podrán ver
 desde la oscuridad y la penumbra.
19 Los pobres volverán a alegrarse en el Señor,
 los más necesitados se regocijarán en el Santo de Israel.
20 Se desvanecerán los despiadados,
 desaparecerán los insolentes,
 y todos los que no duermen para hacer el mal serán exterminados;
21 los que con una palabra hacen culpable a una persona,
 los que en el tribunal ponen trampas al defensor
 y con engaños perjudican al indefenso.

22 Por eso, el Señor, el redentor de Abraham, dice así a los descendientes de Jacob:

«Jacob ya no será avergonzado,
ni palidecerá su rostro.
23 Cuando él vea a sus hijos,
 y la obra de mis manos en medio de él,
todos ellos santificarán mi nombre;
 santificarán al Santo de Jacob,
y temerán al Dios de Israel.
24 Los de espíritu extraviado recibirán entendimiento;
 y los murmuradores aceptarán ser instruidos.»

Ay de la nación obstinada

30El Señor ha dictado esta sentencia:

«Ay de los hijos rebeldes
que ejecutan planes que no son míos,
que hacen alianzas contrarias a mi Espíritu,
que amontonan pecado sobre pecado,
2 que bajan a Egipto sin consultarme,
 que se acogen a la protección de Faraón,
 y se refugian bajo la sombra de Egipto.
3 ¡La protección de Faraón será su vergüenza!
 ¡El refugiarse bajo la sombra de Egipto, su humillación!
4 Aunque en Zoán tengan funcionarios,
 y a Janés hayan llegado sus mensajeros,
5 todos quedarán avergonzados
 por culpa de un pueblo que les resulta inútil,
que no les brinda ninguna ayuda ni provecho,
 sino sólo vergüenza y frustración.»

6 Ésta es la sentencia que se ha dictado contra los animales del Néguev:

Por tierra de dificultades y angustias,
de leones y leonas,
de víboras y serpientes voladoras,
llevan ellos a lomo de burro
las riquezas de esa nación inútil,
y sus tesoros, a lomo de camello.
7 La ayuda de Egipto no sirve para nada;
 por eso la llamo: «Rahab, la inmóvil».

8 Anda, pues, delante de ellos,
 y grábalo en una tablilla.
Escríbelo en un rollo de cuero,
 para que en los días venideros
quede como un testimonio eterno.
9 Porque éste es un pueblo rebelde;
 son hijos engañosos,
hijos que no quieren escuchar
 la enseñanza del Señor.
10 A los videntes les dicen:
 «¡No tengan más visiones!»,
y a los profetas:
 «¡No nos sigan profetizando la verdad!
Dígannos cosas agradables,
 profeticen ilusiones.
11 ¡Apártense del camino,
 retírense de esta senda,
y dejen de enfrentarnos
 con el Santo de Israel!»

12 Así dice el Santo de Israel:

«Ustedes han rechazado esta palabra;
han confiado en la opresión y en la perversidad,
y se han apoyado en ellas.
13 Por eso su iniquidad se alzará frente a ustedes
 como un muro alto y agrietado,
a punto de derrumbarse:
 ¡de repente, en un instante, se desplomará!
14 Su iniquidad quedará hecha pedazos,
 hecha añicos sin piedad, como vasija de barro:
ni uno solo de sus pedazos servirá
 para sacar brasas del fuego
ni agua de una cisterna.»

15 Porque así dice el Señor omnipotente, el Santo de Israel:

«En el arrepentimiento y la calma está su salvación,
en la serenidad y la confianza está su fuerza,
¡pero ustedes no lo quieren reconocer!
16 Se resisten y dicen: “Huiremos a caballo.”
 ¡Por eso, así tendrán que huir!
Dicen: “Cabalgaremos sobre caballos veloces.”
 ¡Por eso, veloces serán sus perseguidores!
17 Ante la amenaza de uno solo;
 mil de ustedes saldrán huyendo;
ante la amenaza de cinco,
 huirán todos ustedes;
hasta quedar abandonados
 como un mástil en la cima de una montaña,
como una señal sobre una colina.»

18 Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad;
 por eso se levanta para mostrarles compasión.
Porque el Señor es un Dios de justicia.
 ¡Dichosos todos los que en él esperan!

Comentario

3. Pregúntale a Dios acerca de Sus planes para ti

A veces hacemos nuestros propios planes de forma independiente o acudimos directo a otras personas para pedir ayuda sin preguntarle primero a Dios. Como Joyce Meyer dice, «cuando tengas un problema: no vayas al teléfono, ve al trono».

El profeta Isaías critica al pueblo de Dios por la forma en que hicieron sus planes. No consultaron a Dios (30:1-2). Como resultado, se fueron en la dirección equivocada. Habían ido a Egipto sin ni siquiera preguntarle a Dios.

El problema es que en realidad no querían conocer los planes de Dios. Su adoración era una mera formalidad (29:13): «Este pueblo dice que me pertenece; me honra con sus labios, pero su corazón está lejos de mí. Y la adoración que me dirige no es más que reglas humanas, aprendidas de memoria» (v.13, NTV).

Jesús dice que aquellas palabras no fueron escritas simplemente para la gente de los días de Isaías. Critica a los fariseos y a los maestros de la ley: «¡Hipócritas! Tenía razón Isaías cuando profetizó de ustedes: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. En vano me adoran; sus enseñanzas no son más que reglas humanas”» (Mateo 15:7-9).

Debido a que sus corazones no están bien con Dios, van muy lejos para esconder sus planes de la vista del Señor: «¡Qué aflicción les espera a los que intentan esconder sus planes del Señor, a los que hacen sus malas acciones en la oscuridad! \[…\] ¡Él es el Alfarero y, por cierto, es mayor que ustedes, el barro! ¿Acaso la cosa creada puede decir acerca del que la creó: “Él no me hizo”? ¿Alguna vez ha dicho una vasija: “El alfarero que me hizo es un tonto”?» (Isaías 29:15-16, NTV).

Como resultado, «hacen planes contrarios a los míos; hacen alianzas que no son dirigidas por mi Espíritu, \[…\]. Pues sin consultarme, bajaron a Egipto en busca de ayuda» (30:1b-2a, NTV).

Ellos «no quieren escuchar la ley del Señor. A los videntes les dicen: “¡No tengan más visiones!”, y a los profetas: “¡No nos sigan profetizando la verdad!” \[…\] ¡Apártense del camino, retírense de esta senda, y dejen de enfrentarnos con el Santo de Israel!» (vv.9b-11).

No querían que los profetas les dieran ninguna exhortación. Ignoraron las señales de advertencia; de hecho, querían retirar las señales de advertencia de la carretera: «¡Apártense del camino, retírense de esta senda…!» (v.11). Respondieron: «Huiremos a caballo» (v.16).

Muchas veces, en mi propia vida he errado por no consultar a Dios y por seguir adelante con mis propios planes.

Pero este pasaje también contiene esperanza respecto a que «los descarriados adquirirán entendimiento» (29:24, NTV). Dios asegura: «Tu salvación requiere que vuelvas a mí y detengas tus tontos esfuerzos por salvarte a ti mismo. Tu fuerza vendrá de depender completamente de mí» (30:15, MSG).

Dios busca activamente a las personas para bendecirlas: «El Señor los espera, para tenerles piedad» (v.18a). En palabras de la versión clásica de Amplified Bible: «Y por lo tanto Él se levanta, para tener misericordia de ti y mostrar bondad amorosa. Porque el Señor es un Dios de justicia. Bendecidos (felices, bienaventurados, envidiados) son todos aquellos que esperan \[de todo corazón\] en Él, quienes esperan y buscan y anhelan \[Su victoria, Su favor, Su amor, Su paz, Su gozo y Su inigualable, compañerismo ininterrumpido\]» (vv.18b-18c, AMPC).

Oración

Señor, quiero conocer Tus planes. Ayúdame a escuchar Tu voz. Ayúdame a venir a Ti en «arrepentimiento y calma», para caminar en Tus senderos en «serenidad y confianza» (v.15).

Añadidos de Pippa

Salmo 107:4,6–7

«Vagaban perdidos por parajes desiertos, sin dar con el camino a una ciudad habitable. \[…\]. En su angustia clamaron al Señor, y él los libró de su aflicción. Los llevó por el camino recto hasta llegar a una ciudad habitable».

Miles de refugiados están huyendo de zonas devastadas por la guerra, huyen desesperados para encontrar seguridad, a menudo con niños pequeños y tras perder a sus seres queridos. Cuando llegan a nuestro país, necesitamos tener compasión y sabiduría para saber cuál es la mejor manera de ayudarles a recuperarse de su trauma y a reconstruir sus vidas.

Versículo del día

Isaías 30:18a

'Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad; por eso se levanta para mostrarles compasión.'

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Referencias

Escritura marcada (MSG) es tomada de la traducción bíblica The Message, no está traducida a español, se parafrasea.

Las citas bíblicas marcadas (AMPC) son tomadas de la Biblia Amplificada® Classic Edition en inglés, no está traducida al español, se parafrasea.

Joyce Meyer, @JoyceMeyer: https://twitter.com/joycemeyer/status/367322178749857792 \[Last accessed: September 2016\]

Unless otherwise stated, Scripture quotations taken from the Holy Bible, New International Version Anglicised, Copyright © 1979, 1984, 2011 Biblica, formerly International Bible Society. Used by permission of Hodder & Stoughton Publishers, an Hachette UK company. All rights reserved. ‘NIV’ is a registered trademark of Biblica. UK trademark number 1448790.

Scripture quotations marked (AMP) taken from the Amplified® Bible, Copyright © 1954, 1958, 1962, 1964, 1965, 1987 by The Lockman Foundation. Used by permission. (www.Lockman.org)

Scripture marked (MSG) taken from The Message. Copyright © 1993, 1994, 1995, 1996, 2000, 2001, 2002. Used by permission of NavPress Publishing Group.

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